La presencia de Coca Cola en México no se limita a las mesas de sus habitantes, sino que llega a las más altas esferas de la política donde ha logrado influir en la toma de decisiones que impactan la vida de los mexicanos.

Para esta empresa, México es su segundo mercado más importante después de Estados Unidos y por ello presta especial atención a sus 120 millones de clientes potenciales. Para evitar regulaciones restrictivas, Coca Cola utiliza estrategias como el fichaje de políticos de alto nivel a través de las "puertas giratorias", sumando expresidentes y exfuncionarios públicos a sus filas y así interferir en aquellas políticas públicas que puedan impactar en sus operaciones y ganancias.

POPLab presenta la versión animada de Las Fichas de Coca Cola una serie de reportajes sobre la empresa y sus vínculos con el poder político en México. Este trabajo realizado por Kennia Velázquez y Elizabeht Rosales, gracias al apoyo de Connectas dentro de ARCO, con el apoyo del International Center for Journalists (ICFJ) en el marco de la iniciativa para el Periodismo de Investigación de las Américas, fue merecedor del Primer Lugar en la categoría Reportaje Destacado de Investigación en los Fetisov Journalism Awards 2022 y finalista en el Premio Nacional de Periodismo 2022 en la categoría Reportaje.

En esta primera entrega, nos referimos a la relación del expresidente Vicente Fox, con Coca Cola quien, durante su presidencia, reclutó a excolaboradores de la refresquera para ocupar puestos clave en el gobierno, como la Comisión Nacional del Agua. Otros expresidentes, como Ernesto Zedillo, también se unieron a The Coca Cola Company después de dejar el cargo.

La relación entre Coca Cola y el gobierno mexicano ha generado críticas, especialmente en temas de salud pública. Se destaca el caso de Mercedes Juan López, exsecretaria de Salud durante la administración de Enrique Peña Nieto, quien se opuso a un impuesto a las bebidas azucaradas. La influencia política de la empresa también se refleja en la contratación de Patricio Caso Prado, exfuncionario de organismos de salud durante el sexenio de Peña Nieto, y que participó en el diseño de etiquetados en alimentos que alentaban un mayor consumo de azúcar. Después de dejar la función pública, Caso se convirtió en empleado de la refresquera.

La OMS ha señalado la relación entre las prácticas comerciales de la empresa y los riesgos para la salud de la población, especialmente en el contexto de las bebidas azucaradas, responsables de miles de muertes anuales en México. En respuesta a las críticas sobre la contratación de exfuncionarios, Coca Cola asegura que sus procesos de selección son objetivos e imparciales, buscando atraer el mejor talento.

Estas son las Fichas de Coca Cola.